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Lo bueno de ir a Italia han sido varias cosas. En primer lugar, un viaje a Italia es siempre una alegría. La emoción aumenta cuando se trata de la primera vez que se visita un país tan lleno de historia, de arquitectura, de diseño, de vida...
En segundo lugar, en mi caso, se trataba de tomarse unas vacaciones con aire mediterráneo para oxigenarme después de llevar 3 meses seguidos sufriendo el duro invierno de Hamburgo. Ha sido una gozada descubrir temperaturas primaverales y poder llevar manga corta de nuevo. Adiós al abrigo y a la bufanda, al menos por unos días.
En tercer lugar, ha sido una suerte conocer a Cri, conectar con ella de esa manera y tener la oportunidad de quedar con ella en tan corto plazo. Ha sido una oportunidad genial para hacernos más amigas y conocer juntas Milano.
En cuarto lugar, y no por eso menos importante, he podido reencontrarme con Patricia. De hecho, visitar a Patricia era el motivo principal de mi viaje. Somos amigas desde hace muchos muchos años, unos 20 años. Ahora mismo puedo decir abiertamente que ella es la amiga que más tiempo he conservado, junto con Sandra. Nuestra relación es muy peculiar, porque nos conocemos mucho y bien, porque nos hemos visto crecer y evolucionar, porque conocemos a nuestras familias y nuestras circunstancias, nuestros defectos y nuestras virtudes. Debido al ritmo de vida que llevamos, cada vez nos vemos con menos frecuencia, aunque últimamente estamos intentando recuperar un contacto más próximo. En esta línea planeamos el viaje, aprovechando que ambas disfrutamos de una beca erasmus se trataba de una oportunidad muy buena para vernos y hacer algo diferente juntas.
Así que cuando fui a verla a Torino hicimos un montón de cosas juntas: pasear con sus amigos erasmus por Torino, una escapada a Avigliana, un pequeño pueblo de montaña, y una súper escapada a Venecia, con parada en Verona, que fue lo mejor del viaje. En Venecia pasamos dos muy buenos días, recorriendo esa ciudad laberíntica, de día y de noche, durmiendo acurrucadas en un hostal, cuatro personas en una cama para ahorrar dinero, je, recorriendo en góndola el gran canal y viendo mil iglesias y una más. Fue un viaje excepcional.









La variaciones de la sensibilidad vital que son decisivas en historia se presentan bajo la forma de generación. Una generación no es un puñado de hombres egregios, ni simplemente una masa: es como un nuevo cuerpo social íntegro, con su minoría selecta y su muchedumbre, que ha sido lanzado sobre el ámbito de la existencia con una trayectoria vital determinada. La generación, compromiso dinámico entre masa e individuo, es el concepto más importante de la historia, y, por decirlo así, el gozne sobre que ésta ejecuta sus movimientos. (Ortega y Gasset. La idea de las generaciones.)
Echando un vistazo a mis últimos posts, he caído en la cuenta de cuál es el problema de fondo que los recorre transversalmente. A veces pensamos y escribimos de forma fragmentaria, sin si quiera vislumbrar el trasfondo de la cuestión. Tras la lectura de unos ensayos de Ortega y Gasset y unos momentos de reflexión he reconocido el elemento común. En este caso la cuestión es mi generación. O mejor dicho, los aspectos de mi generación que me resultan ajenos o erróneos.
Habría que empezar definiendo los límites de mi generación. Ya no somos la generación JASP (joven aunque sobradamente preparado o puteado, según versiones). Tampoco pertenezco a la generación LOGSE, aunque camine en paralelo a sus primeros esperpentos. Entonces, ¿cuáles son los rasgos comunes a mis coetáneos?
Somos la generación que ha nacido en los albores de la democracia; que ha mamado los tiempos del CAMBIO y del CORRUPSPOE; que se ha creído que España iba bien; que ha terminado diciendo NUNCA MAIS y NO A LA GUERRA; que vota la constitución europea mientras celebra el 25 aniversario de una constitución española que no ha leido; que celebra los treinta años de la monarquía mientras nos presentan a la infanta Leonor; que se une para poner flores en la estación de Atocha y se separa para definir la palabra Nación; que piensa que la palabra ESTATUT no tiene traducción al castellano,...
Somos la generación educada con Barrio Sésamo y la Bola de Cristal; pervertida con los Vigilantes de la playa y las Mama-Chicho; aturdida con Farmacia de Guardia y Médico de familia; condenada a la eterna adolescencia con Al salir de clase y Los Serrano; definitivamente machacada por Gran Hermano, Operación Triunfo y similares; desquiciada por Crónicas Marcianas y Salas rosas diversas; que asocia series de calidad a series americanas; que reclama una televisión de calidad que no quiere ver,...
Somos la generación en que los que quieren ser distintos se autoproclaman FRIKIS; los que quieren compartir un hobby organizan unas jornadas; tan lisiada socialmente que para hacer amigos o conservarlos usamos los chats y el messenger; tan aislada que nos comunicamos a través de foros y blogs; la generación de las series FLASH y el zipeado; individuos pegados a un teléfono móvil de por vida,...
Somos la generación de los FOROS, no sólo los de internet, sino el Forum de Barcelona, el Foro Antiglobalización, el Forum de Río de Janeiro, el Foro de Ermua, el Foro de la familia, etc.; cada foro viene acompañado de su respectivo ESPÍRITU: el espíritu de Ermua, el espíritu de Río,...
Somos la generación que piensa que El Señor de los Anillos es la gran obra de la literatura universal; que exige la apertura de un museo de arte contemporáneo en cada esquina sin llegar a poner un pie en ninguno de ellos; que sabe que existe el cine español gracias a que Almodóvar y Amenábar ganan algún Oscar; que sobrevalora la arquitectura-espectáculo de Calatrava y Gehry mientras se conforma con vulgares adosados en las afueras; que piensa que la Estética sólo se practica en clínicas y que el diseño es cosa de interiorismo, y de gays...
Somos la generación que aún no se ha hipotecado, porque no puede, pero que se ve viviendo en pisos de 30 metros cuadrados a precios de infarto; preocupada por el paro y la inmigración; cansada de la clase política; cansada de la falta de clase de los políticos; cansada de la política de las clases,...
Somos la generación de las carreras técnicas, del botellón, de las becas Erasmus, de los matrimonios homosexuales, del Inter-raíl, del laicismo, del RED BULL, de la moneda única EURO, de la píldora del día después, del tratado de Amsterdam, de los piercings y los tatuajes, de la ley anti-tabaco, de la fórmula 1, de las compañías aéreas de bajo coste,...
Y mucho más...
Sin duda, es difícil hacer un análisis así cuando se está involucrado en el problema a analizar, pero es muy sano revisar las cuestiones que nos afectan de forma distinta que a las generaciones pasadas o venideras. El panorama social cambia cada vez más rápido, el tiempo se estrecha, las mentes también.
En este maremágnum es difícil salir medio bien, ¿no?
No es sencillo para mí definir mis gustos literarios. No tengo un género preferido, ni un autor modelo que se haya convertido en mi ídolo. Puedo leer casi cualquier cosa que caiga en mis manos, desde un folleto de los Testigos de Jehová (aunque no se puedan considerar literatura, a veces superan ciertos relatos de ciencia ficción) hasta el ensayo filosófico más rebuscado. Sí, puedo leerlo; el problema viene cuando tengo que digerirlo. Mi estómago se ha vuelto delicado y cierta clase de libros me producen úlcera, a veces verdaderas náuseas. Y más aún, no sólo su lectura me resulta indigesta, también los comentarios recibidos de sus fanáticos lectores.
Percibí estos problemas estomacales cuando el fenómeno "Señor de los Anillos" resurgió con más fuerza. Dicho libro ha formado parte de la biblioteca familiar desde mi infancia, allá por los ochenta, cuando Tolkien era un escritor conocido, pero no idolatrado hasta la saciedad, y su obra no poblaba aún los tableros de rol. Mi hermana se hizo con El Hobbit y el Silmarillion, y me recomendó que empezara por la lectura de El Hobbit. Así lo hice, y el resultado fue una gran decepción. Ante las opiniones de que El Señor de los Anillos poseía toda la complejidad que le faltaba a su hermano menor, inicié la lectura de éste. No pude resistirlo mucho tiempo y lo abandoné, con la sensación de encontrarme ante un truño considerable. Con el fervor despertado hace unos años, retomé de nuevo su lectura, con la esperanza de que mi aparato digestivo, una vez superada la lactancia, pudiera soportar su pesadez. Sobrevaloré mi estómago y desarrollé una profunda aprensión a este tipo de libros. Debo de ser un bicho raro, ya que la opinión general circula más por estos campos:
...Otros dicen que sus obras nos enseñan el significado de las cosas importantes: el deber, la lealtad, la amistad, el amor, la naturaleza, el arte, la mortalidad y, siempre en primer lugar, la esperanza. Para otros, Tolkien consiguió que el hombre moderno volviera a creer en mitos, en dioses, en héroes, en gestas nobles y heroicas que en nuestro mundo gris no sabemos encontrar...
...Y ahora, acabo de terminar de leerlo. Fue más o menos por la página 200 cuando me empecé a dar cuenta. Y la sospecha se fue reafirmando página a página y así hasta el final, después de ser testigo de innumerables prodigios: ¡EL SEÑOR DE LOS ANILLOS es el mejor libro que he leído JAMAS. Es un prodigio, un portento, es el libro de libros...!
¡Dios mío! ¡El libro de los libros! ¿Y yo que pensaba que eso era la Biblia? ¡El mejor libro que he leido...! A lo mejor esta gente tiene que empezar a leer buenos libros para notar la diferencia.
Acto seguido a mi primera crisis estomacal, comenzaron los fenómenos Los Pilares de la Tierra, El Ocho, El Código Da Vinci, y compañía. Dado que Los Pilares de la Tierra trata sobre la construcción de una catedral, me pareció que su lectura podía resultarme interesante y complementaria para mis estudios. ¡Qué error! A las cien páginas del libro me preguntaba cuándo empezaría la historia. Hice una lectura diagonal y deduje que nunca. Sólo se trataba de un montón de papel impreso con simples palabras que narraban...¡nada!
Este último verano sufrí los acosos de mis freakies (o frikis, según se prefiera) para convencerme de la lectura de Dune, al mismo tiempo que pretendían mi participación en sus diversiones. Espero que mi rotunda negación no fuera tomada como una ofensa. Mi respuesta siempre era la misma: lo siento, pero con la cantidad de cosas interesantes que tengo por hacer, perder el tiempo jugando al Muskins (o como se llame) me parece poco ético. Va contra mis principios. Claro que, yo también podía haberme sentido insultada al recibir no pocas veces el apelativo de friki, que según su propia definición viene a ser:
Todos los enajenados por los hobbies juveniles. Equivalente a Otaku en occidente. Fan obsesivo de algo, que tiene todo lo posible de su serie favorita y que vive por y para ella. Los hay de todos los tipos, pero se los suele asociar con series de ciencia ficción, rol o Manga. Es un término con connotaciones negativas.
Una vez en Alemania y superada la amenaza friki que pretendía llevarme al lado oscuro, descubrí que la basura literaria me perseguiría siempre, allá donde fuera. Mi querido Andreas también pretende inocularme su virus, en este caso llamado Terry Pratchett y su "fantástico" Mundodisco.
Pero vamos a ver:
¿Qué tiene de malo leer algo que no sea ciencia ficción o fantasía?
¿El realismo es demasiado duro para nuestras tiernas mentes?
¿Para escribir bien hay que inventarse mundos?
¿No nos basta con el que tenemos?
No estoy en contra de estos géneros imaginativos, todo lo contrario. Pero sí estoy en contra de que sea lo único que se lee hoy en día. Para poder apreciar una buena novela de ciencia ficción, hay que conocer mucho el mundo en el que se vive, y las novelas realistas nos dan una oportunidad única para conocer la condición humana.
Los libros de fantasía y de ciencia ficción, los best-sellers, son a nuestros días lo que los libros de caballería fueron a los tiempos de Cervantes. Hagamos como él y prendamos una gran hoguera con ellos. Promovamos el gusto por la lectura de calidad, por la buena literatura.
Hoy, 13 de marzo, mi abuelo querido cumple nada menos que 91 años. Sí, 91 años, se dice pronto. Yo tenía mis dudas de que fuera a llegar a esta edad, ya que el año pasado,
coincidiendo con mi cumleaños, sufrió varios infartos cerebrales. Pero la medicina moderna es maravillosa y la buena constitución de mi abuelo es extraordinaria. Así que ahí le tenemos, tan chulo, como si nada hubiera pasado, en plenitud de facultades mentales (al margen de las típicas manías que se potencian con la edad) y con las facultades físicas sorprendentemente bien para su edad. Leer sin gafas, caminar sin ayuda, ... El único problema es que está sordo, pero lleva sordo desde que yo le conozco, y siempre hemos pensado que se hace el sordo para no tener que soportar a la abuela, que es un loro y no calla.
Sin ir más lejos, hoy he hablado con él por teléfono y me ha entendido todo, sin problemas. Me hubiera gustado poder estar allí para felicitarle en persona. Siempre he tenido devoción por mi abuelo, a pesar de que sostenga unas ideas que van generalmente en contra de mis principios. Siempre se ha dicho que se reniega de las ideas de los padres y se coincide más con los abuelos. Supongo que será una expresión general aplicable a corrientes ideológicas, más que a una cuestión generacional. Es difícil no renegar de las ideas de unos padres educados en el franquismo, pero es aún más difícil coincidir con unos abuelos falangistas que hicieron la guerra.
Por cierto, no sé por qué últimamente me ha dado por hacer una revisión del franquismo y de la guerra civil española. Hace dos años me dio por la segunda república, movida por la lectura de Josep Pla (El advenimiento de la República) y Manuel Azaña (El jardín de los frailes). Ahora esta nueva indagación ha venido provocada por la lectura de Eduardo Chamorro (25 años sin Franco: la refundación de España). Por cierto, de los tres libros que he mencionado recomiendo encarecidamente el de Pla.
Me impresionó mucho cuando lo leí. El de Eduardo Chamorro me lo podía haber ahorrado. No hubiera perdido nada. En fin, al menos me ha servido como excusa para darme un repaso a la historia española del siglo XX, ésa que no se estudia porque los programas siempre empiezan en la prehistoria y nunca se llega al siglo que más puede aclararnos algunas cuestiones del presente. Menos mal que tenemos a nuestros abuelos para que nos lo cuenten, los que tenemos la suerte de conservarlos.

Estos días no he hecho nada interesante, nada digno de ser contado. Unas cuantas lecturas, unas pelis y muchas horas de messenger con mis amigos... Amigos que siempre me dicen que salga, que me dé un paseo y quede con alguien, o me vaya a visitar alguna zona de la ciudad que no conozca. Y yo digo, vamos a ver, ¿cómo explicarlo...?
El cielo está despejado, hace un día soleado y pienso: Voy a darme un paseo.
¡Error!
Parece incríble pero es cierto. Hoy las mínimas han sido de 17 grados centígrados bajo cero. Las máximas fueron de -1º. Las previsiones para mañana son:

Imposible hacer planes; a partir del miércoles volverá a nevar. Nieve sin tregua al menos hasta dentro de una semana. ¡Y yo de vacaciones! ¿Por qué nadie me advirtió de que me trajera los esquíes? Tendré que volverme muy fleisig, o me volveré muy crazy, sin nada que hacer.
Contra el frío, sopa. Puede ser, pero yo me he preparado un plato de lentejas (haciendo gala de un antiguo mote, lentejis), que me ha sabido a gloria. ¡Uff, Gloria, no quiero saber nada de ese nombre!
A lo mejor ha sido un reflejo inconsciente tras leer un texto de un amigo, titulado Pedos. O tras saber que algún otro ha medido su producción de metano con un gasómetro en un momento de borrachera. ¡Qué mal andamos!

Y para colmo de mis males la página de blogger da mil problemas o más, así que no puedo publicar todo lo que me gustaría.
Encerrada en casa, sola, sin tele, sin contacto... ¡Ufff! Menos mal que tengo un par de libros y un puzzle muy sexy que me ha fabricado Andreas. Gracias, cielo, ¡vaya ocupación para un sábado noche! ¡GRRRRRRRRRR! ¡Venga, veinte días más y se acabó!


Y mi querido compañero de trabajo, Matteo, me acaba de comunicar que se va el 19, así que esta semana tenemos nuestra entrega o seguir trabajando online, lo cual me deja a mí la responsabilidad (y los gastos) de la impresión y entrega del trabajo. Keine lust! Además la fecha de entrega me coincide con las fechas en las que quería ir a Italia, mierda, a ver cómo lo hago. Tendré que dejarlo terminado antes y buscar a los profes. Bien, comienza la cuenta atrás: 10 días para terminar el trabajo. ¡A por ello!
No sé si lo sabéis, pero desde que estoy en Hamburgo vivo sin televisión, ni radio, ni posibilidad de leer un periódico en condiciones (problemas del idioma, ya se sabe; y curiosamente no he encontrado nada de prensa española por aquí; claro, españoles somos pocos, latinoamericanos, es otra historia). Los dos primeros meses, hasta mi regreso de las vacaciones de Navidad, viví incluso sin ordenador, conectándome a internet en la sala de informática de la Universidad cuando me era posible. Esta situación, además de agravar mi soledad, generaba la sensación de vivir en una burbuja, al margen de lo que sucedía en el mundo exterior.
Desde enero vivo pegada a mi portátil y con conexión 24 horas, lo cual ha hecho que internet sea mis ojos, y mi boca en este blog. Gracias a las conversaciones con mis amigos me mantengo enterada de los acontecimientos que ocurren en España, a grandes rasgos, claro. Ellos son mis corresponsales. Pero de vez en cuando, me llegan informaciones sospechosas, inverosímiles, que me hacen buscar por mi cuenta la manera de conocer la verdad.
Tal fue el caso cuando recibí este correo por parte de una amiga. Se trataba de
un reenvío (así que no la acuso a ella de haberlo redactado) que me resultó alarmante en muchos aspectos. Lo voy a reproducir aquí íntegramente, tras haber corregido innumerables faltas de ortografía y un formato ininteligible, para que comprendáis a lo que me refiero.
Enviado el: Tuesday, March 07, 2006, 9:44:14 AM
Subject: Los Latin Kings
Date: Mon, 23 Feb 2006 13:18:52
LATIN KINGS: HIJOS DE PUTA, TODA LA GENTUZA FUERA DE ESPAÑA, ¡LIMPIEZA YA!
Una chica de 15 años ha sido víctima de los Latin Kings en el Campo Grande de Valladolid y otra en Lorca(Murcia); a las dos les han echo lo mismo: la sonrisa del payaso. No hay noticias, no se ha publicado en ninguna parte, los medios de comunicación pasan del tema. La chica en cuestión iba a estudiar cruzando el Campo Grande cuando se cruzó con un grupo de ellos. Después de atemorizarla y apalearla, le preguntaron lo que quería que la hicieran: violarla, darle una paliza, matarla... No se sabe lo que contestó la chica, y ni siquiera si llegó a hacerlo. Está ingresada en la UCI, con la sonrisa del payaso marcada en su cara de por vida... además de que la partieron todos los dientes contra el bordillo... pobre chica. Joder... y tenía 15 años...
¿Qué es la "sonrisa del payaso"? La sonrisa del payaso es algo muy cruento que voy a explicar, pero que considero que puede herir sensibilidades. La tristemente famosa "sonrisa" consiste en hacer rajas por los laterales de los labios de forma que luego cuanto te violan y gritas la boca se te va abriendo y vas sangrando a la vez. Ya les digo, algo muy macabro.
¿QUÉ DEMONIOS ESTÁ PASANDO EN ESPAÑA...?
INCLUSO EN NUESTRA PROPIA CIUDAD. NO PODEMOS DEJAR QUE NOS ATEMORICEN 4 NIÑATOS QUE CREEN QUE PARA INTEGRARSE EN UNA SOCIEDAD HAY QUE UTILIZAR LA VIOLENCIA. TENEMOS QUE FRENAR ESTO... PORQUE YA LE HA PASADO A UNA NIÑA DE 15 AÑOS... PERO ¿QUIÉN SERÁ LA SIGUIENTE? NO VAYÁIS SOLAS A NINGUNA PARTE Y TENED MUCHO CUIDADO. LUEGO, QUE SOMOS RACISTAS, QUE NO ME JODAN... QUE VAYAN A SU PUTO PAÍS A HACER ESAS SALVAJADAS... ¡SERÁN CABRONES! ESPERO QUE LA SOCIEDAD SE CONCIENCIE Y HAGA ALGO CONTRA ESOS HIJOS DE SU PUTA MADRE.
NO SOMOS RACISTAS... ¡SOLO QUEREMOS VIVIR TRANQUILOS EN NUESTRA CIUDAD!
PASAD ESTO, QUE ES MUY IMPORTANTE. TENEMOS QUE HACER QUE CORRA LA VOZ.
Escalofriante, ¿verdad?
Perdón por haber publicado esta mierda, es que sin leerlo no se puede entender el cabreo que me entró. Normalmente voy almacenando en mi cabeza ideas y temas para escribir sobre ellos en este blog. Suelo dejar enfriar las cuestiones, para que mis opiniones aquí reflejadas no sean fruto de un "calentón" ideológico. El correo lo recibí hace ya unos días y me calentó bastante...
Desde el principio de su lectura tuve varias sospechas. Un correo que utiliza en su título la palabras palabra LIMPIEZA, refiriéndose a un grupo de personas, no puede traer nada bueno. Eso de limpiar las calles o limpiar un país suena realmente mal. Puede que me esté volviendo un poco suspicaz con esos temas desde que estoy en Alemania, pero estoy aprendiendo de ellos a medir muy mucho las palabras.
En segundo lugar, el lugar de los hechos era el Campo Grande de
Valladolid, típico espacio cargado de leyendas urbanas, como que te rompen el culo cuando caminas por allí de noche (perdón por la expresión, pero la leyenda es así, no puedo cambiarla).
En tercer lugar, me extraña que haya un grupo de Latin Kings en Valladolid. En las grandes ciudades como Madrid o
Barcelona existen, se sabe que actúan. ¿Pero en Valladolid? Una banda organizada de tales características llamaría muchísimo la atención. La presencia de inmigrantes en Pucela es mínima, comparado con el resto de España, ni hablemos en comparación con Alemania. Pensé: Es imposible que la situación haya cambiado tanto en los últimos meses. Pero quizás son guetos que existen en barrios que yo no frecuento. Por si acaso, seguí leyendo, muy intrigada.
Cuando ya leí que los medios de comunicación no se habían hecho eco del tema, me partí de risa. Es que los que los medios de comunicación pasan del tema... ¿Cómo? ¿Mande? Que los medios de comunicación pasan del tema no se lo puede creer nadie. En general están deseando hacer sangre con este tipo de cosas, que son morbosas y suben la audiencia, así que si hubiera sucedido, sería primera plana de los periódicos locales. Entonces ahí sí que empecé a encenderme. La misma gente que te reenvía los correos de Dios mío, dios mío, cierran hotmail... Si no reenvías esto tu cuenta será cerrada..., que me parecen de lo peor, pero son correor inofensivos, se dedican a reenviar este tipo de correos, sin pararse a contrastar los hechos, dando por ciertos unos hechos que son muy serios y pueden traer consecuencias graves.
Pensé que un suceso así, si fuera real, tenía que haber dejado algún tipo de huella en internet. Busqué y hallé un listado de enlaces muy esclarecedores, de los que elegí un par como respuesta al correo:
http://www.escolar.net/MT/archives/2006/02/la_sonrisa_del.html http://blog.spacebom.com/29/del/12/del/2005-la-sonrisa-de-los-payasos/ Las explicaciones dadas en estos enlaces me parecieron más lógicas y creíbles que la sarta de mierda que contaba el mensaje original.
La idea de que un grupo de neonazis, o neofascistas, o skinheads, o como les quieras llamar, vayan divulgando esta clase de mentiras para crear una situación de alarma social que les favorezca, me parecía mucho más factible que la impresionante historia de la agresión en el Campo Grande. El lenguaje utilizado en el correo era propio de un grupo de estas características, utilizando los insultos, la expulsión del país como solución a los problemas y el manido
argumento de No, si yo no soy racista, só lo quiero que me dejen vivir en paz en MI PAÍS. ¿Tú país? Perdona si me parto de risa.
Me gustaría que alguno de estos niñatos sin coco se tuvieran que ir a un país extraño a buscarse el pan. Y que supieran lo que es que la gente les mire con asco y miedo por la calle, sólo por el hecho de ser diferentes. Aquí en Hamburgo la gente me confunde con turca muchas veces, porque no soy la típica española morenita de piel y folclórica, y sí he sentido miradas de asco, de repulsa. Cuando Andi y yo vamos juntos en el metro, la gente nos mira, pensando que somos una pareja "extraña", un alemán y una turca liberada, algo así. Os aseguro que no es agradable y mucho menos justificable.
Además de faltas de ortografía monumentales, que por respeto al idioma que me da voz he tenido que corregir, el texto está plagado de incoherencias, como por ejemplo:
NO PODEMOS DEJAR QUE NOS ATEMORICEN...
Y acto seguido asegurar:
NO VAYAIS SOLAS A NINGUNA PARTE Y TENED MUCHO CUIDADO...
Pero vamos a ver, ¿en qué quedamos? La forma de demostrar que no nos atemorizan es seguir haciendo una vida normal, ¿no? Entonces, ¿quién está atemorizando a quién? La respuesta está bien clara.

Y ¿por qué es un correo dirigido a las mujeres? Que yo sepa, ese tipo de prácticas se realizan tanto con hombres como con mujeres. Nos intentan acojonar con el miedo al inmigrante cuando los peores asesinos y maltratadores los tenemos en casa.
Con toda esta parrafada no quiero decir que los Latin Kings u otras bandas similares no existan, ni que no sean peligrosas. Estoy segura de que existen y no son unos santos. Sus actos delictivos deben ser juzgados y condenados, evidentemente, pero llegar a la solución de la expulsión, como ha sucedido en Francia, me parece el remedio más radical. Esperemos que seamos capaces de aprender de los errores ajenos para solucionar los problemas de falta de integración social de un modo más civilizado.
Precisamente en Valladolid tenemos otro tipo de bandas juveniles, violentas y descerebradas, que van marcando esvásticas en la cara de la gente. Y grupos de jovenzuelos, que apalean y queman impunemente a un mendigo, como lo sucedido en un cajero de Barcelona. Estos hechos son cometidos por niños de papá y mamá, buenos chicos con buenas pintas...
Sólo pido a mis "corresponsales" que apliquen un poquitín más de rigor en sus informaciones.
Nunca pensé que el título de mi blog fuera a ser tan apropiado y tan válido en todo momento. El frío
continúa, más frío que nunca, si cabe. Las temperaturas no son mortales, pero suficientemente bajas como para que salir a la calle sea incómodo, posible, pero incómodo. Si no hay necesidad, ¿para qué sufrir gratuitamente?
Me hace mucha gracia cuando hablo con alguno de mis amigos que estáis en Valladolid y me decís que ha nevado. Uff, ayer hasta cuajó, ¡un par de centímetros! Burgos es otra cosa, lo sé. Allí sí nieva. Pero creo que cuando Rubio y Ele vinieron pudieron comprobar que esto no es ninguna broma. Incluso
descubrieron nuevos sonidos, la nieve cuando cae sobre más nieve reciente, sobre hielo, sobre nieve helada,... Por eso hay tantas palabras para definir la nieve y los distintos matices del color blanco, como los esquimales.Las fotos que aquí presento acaban de ser tomadas desde la ventana de mi habitación, hoy, 10 de marzo, a las 12 del mediodía. Y no es algo esporádico. Nieva un día sí y uno no, a veces y uno también. En octubre empezaron las primeras nevadas y no se sabe cuándo serán las últimas, pero estoy deseando que lleguen
para poder empezar a caminar por la calle sin sentir punzadas de dolor en los dedos, la nariz, los pies,... No es broma, por un paseo por el parque de Harburg tuve que volverme a casa corriendo para entrar en calor porque no podía soportarlo más. Empezaba a notar serios problemas en las piernas y las manos. Los picores eran insoportables... Lo pasé mal, eh.He tomado la decisión de que nunca viviré en una latitud más al norte que Hamburgo, al menos durante los meses de invierno. Por mucho que sienta curiosidad por países como Suecia, Finlandia y Noruega en
Europa, o Canadá en América, lo siento mucho, pero serán lugares para visitar, no para vivir. Mi salud no me lo permitiría. Y la imposición de una vida relegada al interior, me asfixiaría. Para estar en clausura me voy a un convento, de retiro espiritual. Al menos así, me ahorraría el trabajo y los impuestos...